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Abrasión corneal
La abrasión o úlcera corneal se produce cuando la córnea se daña a causa de pequeños arañazos o cortes. Un seguro oftalmológico adecuado y un tratamiento de urgencia ideal pueden salvar la percepción visual.
Una zona de raspado corneal o úlcera se produce cuando la capa externa y directa del ojo experimenta un problema físico que suele producirse por pequeños arañazos o cortes. Estas heridas son totalmente incómodas y cuando se recuperan pueden dejar una cicatriz en la córnea -que influye en la visión-, que en general espera un procedimiento médico para solucionarse.
Los ojos son quizás las piezas más delicadas del cuerpo humano debido a la importante capacidad que desempeñan, la visión. Por eso están muy protegidos por los párpados y las pestañas, a pesar del reflejo obligatorio que nos hace cerrar los ojos rápidamente para evitar daños, o el lagrimeo, que arrastra y elimina las partículas de la superficie visual.
Sin embargo, a pesar de esta carga de componentes defensivos, en algunos casos las heridas son inevitables. Por lo general, éstas se producen en la capa externa del ojo llamada córnea, una lámina sencilla que cubre el ojo y que, junto con el punto focal, nos permite concentrarnos con precisión.
La zona de raspado de la córnea es un problema típico que ocurre en su mayor parte en los niños, aunque los deportes al aire libre, por ejemplo, el ciclismo, incrementan además el peligro de que artículos desconocidos entren en el ojo y causen daños.
Las Causas de Abrasión Corneal e indicaciones
Existen numerosas razones para el raspado de la córnea o la lesión corneal, pero las más reconocidas son las siguientes
Lesión directa: normalmente, cualquier golpe puede causar una lesión.
Cuerpos extraños: Los cuerpos extraños son cualquier componente externo, por ejemplo, trozos de polvo, pestañas, arena o pequeñas virutas, que pueden introducirse en el ojo y cortar la córnea. Estos arañazos son igualmente arriesgados debido al peligro previsto de contaminación.
Focos de contacto: la colocación y retirada constante de los focos de contacto de vez en cuando provoca heridas.
Control: de vez en cuando nos frotamos los ojos con demasiada fuerza y dañamos la córnea. Esto es excepcionalmente normal en niños muy pequeños que aún no son dueños de su solidaridad.
Signos e indicaciones de Abrasión corneal
Por regla general, nos damos cuenta cuando nos entra algo en el ojo, y está claro que si todavía nos molesta después de un par de horas es porque ha habido un problema físico. Sea como fuere, esta no es generalmente la situación, y necesitamos darnos cuenta de los signos para reconocer un punto de raspado de la córnea, particularmente en los niños.
– Dolor, escozor y molestias oculares con enrojecimiento.
– Sensación de tener algo clavado en el ojo.
– Lagrimeo; el ojo produce lágrimas tratando de purificarse y eliminar lo que está causando el daño.
– En los jóvenes se puede notar un entrecerramiento excesivo del ojo afectado y, en ocasiones, el párpado se mantiene cerrado.
– Puede haber visión borrosa y afectación a la luz.
– A veces va acompañado de migrañas.
Lo que hay que hacer y lo que no hay que hacer con las manchas de la córnea
En la mayoría de los casos, el raspado de la córnea se debe a heridas menores que se recuperan repentinamente en dos días; el lagrimeo ayuda a lavar incesantemente todas las partículas desconocidas como la arena, las pestañas, los bichos, etc. El tratamiento de emergencia si se produce una mancha de córnea raspada consiste en reconocer la gravedad de la lesión y actuar de la misma manera, así como prevenir posibles complicaciones:
– Es muy importante no frotarse los ojos si se sospecha de alguna lesión.
– Si se dispone de un cuerpo desconocido, se debe permitir que las lágrimas fluyan. Cuando se quiera, se puede utilizar un arreglo salino para ayudar a lavarlo mientras se intenta eliminarlo con un algodón estéril o un apósito.
– Si el componente inseguro se inserta en el ojo, nunca intente eliminarlo en casa, siempre vaya a una comunidad de bienestar. Para esta situación es particularmente significativo no frotar los ojos. Si la persona afectada es un niño, debe estar bajo observación constante.
– Se puede utilizar un fijador de ojos como límite defensivo mientras el ojo se recupera.
– No use focos de contacto hasta que se recupere por completo para evitar la contaminación y los enredos.
– Existen tratamientos y gotas para los ojos, que son antitoxinas para protegerlos de la contaminación, pero que además adelantan la curación.
– Si el agravamiento es grave, se pueden tomar analgésicos de venta libre, como el paracetamol y el ibuprofeno.